Un meteoro es
el fenómeno luminoso que se produce por la ionización del aire cuando los
meteoroides son atraídos por la gravedad terrestre y entran en contacto con la
atmósfera. El fenómeno también se conoce como “estrella fugaz”.
Aproximadamente dos
veces por semana, un meteoro del tamaño de una almohada se precipita sobre la Tierra
y detona con la fuerza de una bomba atómica. Afortunadamente, en nuestra
atmósfera se vaporizan a unos 8 km. sobre la Tierra. Por otra parte, en raras
ocasiones, al penetrar en la atmósfera y antes de impactar contra el suelo,
también se observa que los meteoros explotan y resultan muy brillantes. En
oportunidades, si son espectacularmente brillantes, se los puede ver durante el
día; a veces aparece un meteoro que en su trayectoria en el cielo deja una
estela brillante y que al desintegrarse puede producir fuertes ruidos, cuando
sucede un fenómeno como éste, al meteoro se lo denomina bólido.
Si además los meteoros son lo suficientemente grandes, antes de quemarse
totalmente atravesando la atmósfera pueden llegar a impactar la superficie
terrestre, entonces se los denomina meteoritos.
Fue uno de estos
fenómenos, según creen los científicos, lo que causó la extinción de los
dinosaurios cuando fue a dar en Chicxulub, en la provincia yucateca de México.
Se cree que ese tenía 10km. de diámetro.
Hay épocas del año en
que desde un cierto lugar de la Tierra, el cielo se llena de meteoros formando
verdaderas "lluvias
de estrellas fugaces", las que suelen durar unas horas
o bien unos días. Por un efecto de perspectiva, para el observador terrestre,
todos los meteoros de una lluvia parecen
emerger de un único sitio del cielo, llamado "punto radiante".