Los cometas son cuerpos frágiles y pequeños, de forma irregular, formados por una
mezcla de sustancias duras y gases congelados. Un cometa consta de un núcleo de
hielo y roca, rodeado de una atmósfera nebulosa llamada cabellera.
El astrónomo estadounidense Fred Whipple describió en
1949 el núcleo, que contiene casi toda la masa del cometa, como una "bola
de nieve sucia" compuesta por una mezcla de hielo y polvo.
La mayor parte de los gases que se expulsan para formar
la cabellera son moléculas fragmentarias o radicales de los elementos más
comunes en el espacio: Hidrógeno, Carbono, Nitrógeno y Oxígeno.
La cabeza de un cometa, incluida su cabellera, puede
ser mayor que el planeta Júpiter. Sin embargo, la parte sólida de la mayoría de
los cometas tiene un volumen de algunos kilómetros cúbicos solamente.
Cuando los cometas se acercan al Sol y se calientan,
los gases se evaporan, desprenden partículas sólidas y forman la cabellera.
Cuando se vuelven a alejar, se enfrían, los gases se hielan y la cola
desaparece.
Cristian Alexis Castillo García #5